miércoles, 27 de mayo de 2009

Barça eterno en Roma




La ciudad eterna es el escenario de la confirmación de un Barça inolvidable. La victoria contra el Manchester United lleva al club la tercera Copa de Europa y el triplete. El 3 ya es un número mágico. Barça, Barça y Barça.
Como hubo un Barça de las Cinco Copas o un Dream Team, el club ya tiene a su Barça del triplete. La proeza de Josep Guardiola, en su primera temporada como entrenador del Barça, ha llegado al punto culminante con la consecución de la Liga de Campeones contra el equipo que todo el mundo consideraba como el mejor del mundo. Ahora, el Manchester United, que aspiraba a repetir título en la Champions, ya tiene sustituto.


El primer triplete del siglo XXI

Hasta ahora, el Celtic (1967), Ajax (1972), PSV Eindhoven (1988) y el Manchester United (1999) eran los únicos que podían presumir del máximo triplete (Liga, Copa y Copa de Europa). Ahora, el Barça se añade a este grupo selecto de equipos por la puerta grande, en pleno siglo XXI, en el que la competitividad es aún más feroz. El 27 de mayo ya no será un día cualquiera para los culés: después del 29 de noviembre, esta nueva fecha representará la fiesta azulgrana por antonomasia.

Amor al fútbol

Y el Barça ha llegado hasta aquí con una declaración de amor hacia el balón, el fútbol en estado puro. Con un estilo irrenunciable e indiscutible, toda Europa conoce el ‘sello Barça', la evolución lógica y mejorada del Dream Team de Johan Curyff.

En esta declaración de intenciones, la cantera ha tenido un papel fundamental. El
Barça es un Barça de casa, con 7 jugadores del fútbol base en el equipo titular de una final europea. La envidia de cualquier institución que quiera estar arraigada a sus esencias, como lo está ahora el FC Barcelona, en una combinación justa de talento de casa y cracks foráneos.

Admirado Guardiola

Guardiola lo niega y lo negará, pero su llegada al banquillo es una de las claves para entender que este equipo haya cambiado totalmente de fisonomía, en poco más de un año. Su capacidad de liderazgo, de motivar a los jugadores, de hacerlos creer en sus posibilidades, combinado con una extraordinaria capacidad de trabajo (también en equipo) y de análisis de los aspectos tácticos del fútbol son valores que, con el aval impecable de los resultados, ya le han servido para hacerse un lugar en la historia del banquillo del Barça. Y del fútbol.

Estas virtudes eran las mismas que ya mostraba hace ahora un año (lo había demostrado con el entonces Barça B) y que le hicieron merecedor de ser escogido para el reto del Barça. Y pese a que la decisión no era fácil, el tiempo ha demostrado que fue acertada. Y el barcelonismo lo disfruta, ¡y de qué manera!

No hay comentarios: