El Barcelona volvió a jugar bien y consiguió una valiosa victoria en Glasgow que le sirve para encarrilar la eliminatoria. Los de Rijkaard monopolizaron el balón durante la inmensa mayoría del encuentro y sólo la falta de efectividad de los españoles evitó una goleada escandalosa. La fortaleza en ataque contrastó en la debilidad demostrada en defensa. Dos errores defensivos imperdonables dieron lugar a los tantos del Celtic y permiten a los escoceses soñar con la 'machada' en el Camp Nou.
El Celtic planteó el partido con una estrategia muy peligrosa: dejar el balón al Barcelona. Los azulgrana no suelen rechazar ese tipo de regalos y volvieron a jugar como en los viejos tiempos. Deco, Ronaldinho, Messi, Henry... Todos querían participar. Los catalanes acaparaban el juego y de repente surgió Vennegoor para aprovecharse de un error defensivo de los españoles. Cuando parecía que el Barcelona se iba a pasear por Glasgow, el Celtic les devolvió a la cruda realidad.
Sin embargo el Barça estaba arrollando y al par de minutos Messi ya había puesto de nuevo las tablas en el marcador. Con el empate siguió el vendaval blaugrana y se volvió a repetir el guión. Otro error defensivo -mala actuación de la zaga en general y de Milito en particular- permitió que Robson batiera con una excelente vaselina de cabeza a Valdés. El de Hospitalet pudo hacer muchísimo más para evitarlo y el Barcelona se marchó al descanso perdiendo.
Tras la reanudación el partido siguió con la misma dinámica y los de Rijkaard echaron mano de su calidad para volver a empatar el partido. Ronaldinho recuperó un balón en el centro del campo y se lo dio a Henry para que el francés marcase un gol marca de la casa. La tranquilidad volvió al cuadro español y siguieron aprovechándose de las facilidades que los escoceses les daban. No obstante, la gran cantidad de ocasiones marradas hacía pensar que el partido acabaría en tablas.
Cuando ya parecía que el marcador no se iba a mover, Messi se aprovechó de un regalito para poner el definitivo 2-3. Etoo se fue por banda derecha, colgó un balón que chocó en la defensa local y que le llegó muerto al argentino. La Pulga -que cuajó una actuación excelente- no perdonó, se deshizo de su defensa y mandó el balón a las mallas. Pudieron caer más pero, viendo como se le llegaron a poner las cosas al Barça y teniendo en cuenta que estamos en Champions, los culés tienen motivos de sobra para estar contentos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario